Hasta hace relativamente poco, el padel era visto como un deporte elitista practicado por los más pudientes. Sin embargo, en los últimos años el pádel se ha popularizado y cada vez son más los que los practican. Tanto las urbanizaciones privadas como las dotaciones deportivas públicas se han llenado poco a poco de pistas para la práctica de este juego y, hoy por hoy, no es difícil encontrar a adultos o niños que se animan con la práctica de este completo deporte.

Desde la primera vez que entras en contacto con las palas de padel este juego se convierte en algo casi adictivo. ¿La razón? es un deporte completo en el que pones en acción todo tu cuerpo, puedes practicarlo todo el año, tanto al aire libre como en pista cubierta y, además, es una buena oportunidad de pasar un rato con los amigos.

La importancia de la alimentación

Si practicas deporte de forma habitual ya sabrás lo importante que es una correcta alimentación. El padel no es menos y para una mejor práctica del mismo se aconseja una dieta basada en tres factores: hidratos de carbono que aporten energía a los músculos; proteínas que ayuden a regenerar el desgaste de los tejidos que causa esta práctica deportiva y grasas insaturadas que son también una buena fuente de energía. Por supuesto, no hay que olvidarse de los minerales y vitaminas y de estar siempre correctamente hidratado.

El calentamiento

Antes de coger las palas de padel y a fin de evitar lesiones, nada como un calentamiento específico. Aunque cualquier ejercicio de calentamiento es válido, no debemos olvidarnos de hacer un poco de carrera continua y ejercicios que activen nuestros tobillos.

En invierno, jugar al aire libre da más pereza debido al frío. En este caso podemos optar por el llamado «calentamiento de la cebolla», es decir, comenzar el calentamiento bien abrigados y, a media que vamos entrando en calor, nos vamos quitando prendas para poder luego jugar más ligeros y cómodos.

Hecho el calentamiento general toca ponerse manos a la obra con las palas de padel y realizar un pequeño calentamiento con movimientos similares a los que realizaremos una vez comenzado el partido.

¿Cómo mejorar tu juego?

No cabe duda de que en el padel, como en el resto de deportes, la mejor manera de mejorar es practicar. No obstante, para mejorar tu técnica, hoy en día puedes contar con el apoyo de grandes profesionales que te ayudarán a mejorar tu juego, ya sea en clases grupales o personales.

El padel es un juego en el que tan importante como la forma física es la concentración. Para reforzar su nivel de concentración hay quienes incluso recurren a técnicas como la hipnosis o métodos de desarrollo como el yoga, consiguiendo excelentes resultados.

El padel es mucho más que una moda, es un deporte muy completo con el que, además, puedes pasar un estupendo rato de diversión. Si todavía no lo conoces te animamos a probarlo y a comprobar por ti mismo por qué tiene tantos adeptos en todo el mundo.